Dudas que le pueden surgir al novio a la hora de vestir

¿Quieres conocer los errores más comunes que pueden suceder a la hora de elegir el vestuario de la boda?

Ya sea un traje de vestir o un chaqué, el novio puede verse asaltado por una serie de dudas que le pueden llevar a cometer algunos fallos, si no es asesorado correctamente, a la hora de elegir la indumentaria adecuada para su boda. Nos referimos sobre todo a errores estilísticos o protocolarios, que son fácilmente evitables.

¿Todo el mundo puede elegir chaqué o traje de novio?

Los factores que influyen para poder dar respuesta a esta pregunta, son dos: depende de la etiqueta de la boda y del momento del día.

Si se exige etiqueta (es decir, si es una boda formal) elegiremos el chaqué. Siempre y cuando la boda sea de día.

Si es más informal, o podemos vestir con media etiqueta (esta decisión dependerá únicamente de los novios), el novio podrá vestir con un traje de novio (sea boda de día o de tarde).

¿Cuál es el largo perfecto del pantalón?

El pantalón siempre debe acabar al comienzo del tacón del zapato.

¿Y el largo de las mangas de la chaqueta?

Será aquel que deje sobresalir entre 0,5 y 1,5 cm las mangas de la camisa.

¿Se puede llevar prendido y pañuelo?

El novio puede llevar ambas cosas, y dependerá de él si quiere llevarlas o decantarse por una u otra. El prendido, o flor en el ojal solo lo puede llevar él y el padrino.

El pañuelo puede ir a juego con la corbata o en cambio, hacer contraste.

¿Se puede prescindir del chaleco?

No. Es sin duda una prenda fundamental en cada una de las indumentarias que puede escoger el novio. Los hay también de varias formas entre las que se pueden elegir: cruzados, semicruzados o rectos.

¿Puedo ir con la chaqueta sin abrochar?

No. Solamente deberás dejar el último botón desabrochado antes de comenzar la ceremonia. Una vez te sientes, ya te puedes desabrochar la chaqueta, pero nunca quitártela.

Nuestra recomendación es que a la hora de probarte el traje o chaqué, consultes con el profesional que te atienda para estar siempre bien asesorado a la hora de vestir y así no cometer fallos.